
EditorialesLocalesOpiniónPolítica
EL COSTO DE LA POLITICA
¿Cuánto debe ganar el Intendente y sus funcionarios?
Mucha tinta, horas de tv y radio se le ha dedicado al “sueldo” de los funcionarios en los estamentos de gobierno sean estos nacionales, provinciales o locales, discusión apasionada que se instala en la mesa de café o en la “raviolada” de los domingos en familia.
Está más que claro que la ciudadanía exige transparencia en el manejo de los fondos públicos, de hecho existen algunas herramientas que no vamos a ahondar pero si recordar por ejemplo las Declaraciones Juradas.
Pero al momento de fijar los sueldos existe una Ley Orgánica de las Municipalidades que señala que los intendentes no pueden cobrar menos que diez sueldos mínimos de los empleados municipales de su distrito. Esta Ley pone el piso, no el techo.
Posición Adelantada, consultó al Secretario de Gobierno y Jefe de Gabinete Alejandro Vieyra, cuanto es el Sueldo del Intendente Municipal Hernan Bertellys.
La respuesta de Vieyra fue “$106.000 bolsillo total, con gastos de representación” y se comprometió a mostrar el recibo de haberes del Intendente Municipal.
Propongo pensar de otra manera, de hecho lo entiendo así. No importa lo que gana, sino si se lo merece- aclaro que no hablo de ganar un disparate-.
Acá es donde entra a jugar un sinfín de posiciones con las distintas miradas de aquellos que no se sienten identificados con el proyecto político que representa, que no le gusta la cara del Intendente, etc.
Obvio que con cualquier monto que gane va a estar disconforme y aquellos que sí se sienten identificados van a tratar de justificar lo que gana.
¿O usted se acuerda cuánto ganaba De Paula, Rodríguez, Barberena o Duclós?, ¿alguna vez votó pensando si ganaba poco o mucho? Seguramente, la mayoría No.
Acá lo que hay que transparentar es el gasto de la política, cómo se sostienen los partidos políticos, agrupaciones, etc., cómo consiguen los fondos para encarar una campaña que se saben son millonarias.
No deja de ser atractivo como disparador cuestionar el sueldo del Intendente, concejales y funcionarios, pero ésto se desvanece, y más en el caso de los Intendentes cuando es la Ley que fija el mínimo y está atado al sueldo de un empleado municipal.
Imaginemos una clase de gabinete y concejo ad honoren, cero gasto para la administración, ¿cómo le exigiríamos si lo hacen gratis? Y estaríamos fomentando que sólo una élite de privilegiados nos gobiernen.
Debería medirse por resultados y cada cuatro años el futuro del Intendente está atado a eso.
¿Cómo medir la gestión de gobierno del Intendente previo al acto electoral, y en cualquier momento?
Algunos indicadores podrían ser:
- Cuantificar los niveles de calidad y satisfacción y establecer evoluciones y comparaciones entre servicios y entre ciudades vecinas similares a la nuestra.
- Transparencia en los actos y gastos públicos.
- Calidad de Planificación en función al contexto socio-político local.
- Adecuación de los recursos humanos a las necesidades de los servicios.
- Mejora del servicio al ciudadano.
Para cerrar, vuelvo a la transparencia del financiamiento de la política dado que esa es la discusión que debería darse, para que la de los sueldos de los funcionarios no se transforme en una cortina de humo, que se esfuma con un mínimo soplido.
Claudio Bevacqua
Director Posición Adelantada.